Que nos divide... que nos separa... tan fina como un lienzo que me impide pasar... y llegar de algún modo a ti... a tu interior que a veces se siente tan guardado... tan escondido...
Ven un rato... toma mis manos y siente lo que ellas te dicen... mis manos van a hablar de lo que llevo dentro... de lo que quiero entregarte... de esta vida que tengo... de lo mucho o poco que poseo...
Ven y siente mi cuerpo... pálpalo, disfrútalo... fue hecho para ti... a tu medida y propósito... recórrelo... y luego si quieres regresa donde comenzaste... y retrocede... retrocede... porque si avanzas quizás no puedas liberarte... ni liberarme..., pero si no te liberas ni me liberas vamos a estar encadenados a un eterno disfrutarnos...
Te doy mi esencia enteramente femenina... con todo lo que se ve y lo que no... con las energías que transmite... con fuerzas para amar... para volar... para recorrerte... porque cada tansitarte significa un renacimiento en mi... porque cada gozarte es una efervescencia que indefectiblemente termina escapándose por mis poros... por mi piel... por mi cuerpo... por mi vida... y con cada estremecimiento simplemente estoy diciéndote que vives en mi... que reinas en mi... que en cada orgasmo muero... pero vuelvo renovada y llena de ti...
Voy a traspasar tus muros... como cada vez que me dejas... y entonces, voy a quedarme un rato en ti... amor eterno, que me haces felíz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario